
Kiratsu, está respondiendo bastante bien, de hecho necesita también un buen pinzado. Hace una semana creí que se había marchitado. Se trata de un bonsai bastante pequeño, casi se podría encuadrar en los del estilo "mame". El cepellón es muy pequeño y la verdad es que Kiratsu, es una Serissa phoetida bastante frondosa, eso hace que la transpiración de su frondosa copa deje el cepellón bastante seco en un par de días, sobre todo con la calefacción a tope que ha sido necesaria estos días debido a estas impresionantes nevadas. Por eso cuando me di cuenta sus hojas estaban mustias y arrugadas, pensé que le habia pasado lo peor que le podría pasar. Por si acaso, se me ocurrió hacerle un riego por inmersión, el cepellón estaba tan seco que empezó a flotar cuando intenté sumergirlo, así que lo tuve que sujetar un buen rato dentro de su maceta. Lo tuve sumergido unos quince minutos y lo devolví a su sitio habitual. Fue impresionante porque en tan solo un par de horas Kiratsu estaba como si no hubiera pasado nada, nadie podría haber imaginado que un par de horas antes estaba al borde de la marchitación.
Pero el tema que nos ocupa en esta historia es otro. Kiratsu necesita un pinzado, pero he leído por ahí en esos sitios de la web que si queremos que nuestra Serissa phoetida florezca en primavera, tenemos que evitar el pinzado de septiembre a octubre, estamos en febrero pero de todas formas si pinzo ahora a Kiratsu, antes de la floración y teniendo en cuenta que los brotes de floración están justo en los extremos de las ramas, perderá toda su espectacular floración blanca. Así que solo he cortado alguna rama interior, de las que no tenían hojas aclarando un poco el centro de la copa. Y ahora solo queda esperar a la primavera, a ver si tengo suerte y Kiratsu florece.